Italia 1 - 0 Uruguay

Con estilos similares, italianos y uruguayos se han sabido destacar a lo largo de la historia del fútbol. Con pierna fuerte, contragolpe y efectivdad, era de esperarse que esa mística que tienen desde hace años no iba a cambiar a la hora de definir un grupo y, menos aún, de quedarse o no afuera de una Copa del Mundo. Y eso fue lo que mostraron en Natal, en un choque rodeado de emotividad, que se definió de esa misma manera.

Por cuestiones matemáticas, Uruguay intentó proponer un poco más. Con Suárez, Lodeiro y Cavani de arranque, Tabárez fue a buscar la victoria que necesitaba para meterse en octavos de final. Pero Italia estaba bien armado atrás, con una buena doble línea de cuatro que la Celeste no podía romper. Apenas una buena doble pared entre Lodeiro y Suárez sobre el final del primer tiempo que terminó tapando bien Buffon fue la única llegada en 45 minutos.

Pero todo lo aburrido que fue esa primera parte se convirtió en emoción en el segundo. Enseguida, a los 12', Marchisio se fue expulsado por un tremendo planchazo a Arévalo Ríos y, a partir de allí, el encuentro cambió. Prandelli se vio obligado a ser más defensivo de lo que ya era y el Maestro metió a Stuani y así sumar gente en ataque. Los charrúas iban, pero chocaban constantemente contra una pared azul, que no mostraba fisuras.

Sin embargo, siempre existe una manera de abrir el marcador ante un equipo así: la pelota parada. Godín, que ya estaba parado como un nueve más durante los últimos minutos, ganó por encima de todos y, como en Atlético de Madrid, convirtió un golazo decisivo a los 35 minutos con un gran cabezazo cruzado en el palo izquierdo de Buffon.

Así, Italia, una vez más, se vuelve en primera ronda - como en Sudáfrica 2010 - y se convierte en otra de las potencias europeas que quedan eliminadas con pena y sin gloria. A pesar de un buen arranque ante Inglaterra, se quedó y regresa antes de lo esperado. Uruguay, en cambio, se repuso del golpe sufrido ante Costa Rica en el debut y sigue adelante en el Grupo de la Muerte. Evidentemente, Brasil le sienta bien.